Lotte Peplow
¿Cómo entró en la industria cervecera? ¿Por qué le importa la cerveza?
Llevo toda mi carrera en el sector cervecero, pero al principio en la periferia, y llegué a él por la vía de las relaciones públicas y el marketing. A medida que crecía el mundo de la cerveza artesana, también lo hacía mi interés y mi pasión por el tema. Tuve la suerte de comenzar mi larga relación con la Brewers Association allá por 2006 y poco a poco fui asumiendo más responsabilidades. Mi papel se fue ampliando hasta que en 2019 me nombraron embajador de la cerveza artesana estadounidense para Europa. Es un honor y un privilegio trabajar para la Brewers Association y me siento increíblemente orgulloso de representarla tanto cuando viajo al extranjero como cuando estoy en casa, en el Reino Unido. Para mí, la cerveza no es sólo una profesión, sino una forma de vida. Me encanta la gran variedad de sabores y aromas de la cerveza. Es muy versátil y es el acompañamiento perfecto para la comida. Me encanta la comunidad cervecera y la gente que hace que esta industria sea especial. Todo el mundo es amable, acogedor y está unido en una apreciación compartida de esta hermosa bebida. Es un espacio de colaboración único y me considero muy afortunado de estar asociado con algunas de las mentes cerveceras con más talento del sector.
¿Por qué participa como juez en la Copa Mundial de la Cerveza? ¿Qué significa para usted ser jurado en la Copa Mundial de la Cerveza?
Juzgar en la Copa Mundial de la Cerveza es la cima de mi viaje cervecero y el estándar de oro de los jueces cerveceros. Es como competir en los Juegos Olímpicos. La calidad de la competición es insuperable, desde la calidad mundial de las cervezas participantes hasta el alto nivel de los jueces y la organización profesional y fluida entre bastidores. De todos los concursos que he juzgado en el mundo, la Copa Mundial de la Cerveza es el mayor, el más prestigioso, el más internacional, el mejor organizado y el más profesional de todos, en mi humilde opinión, por supuesto. Ser seleccionado como juez para la Copa Mundial de la Cerveza es un gran honor y me llena de orgullo. Me encanta juzgar porque concentra mi mente en todo lo que he aprendido sobre la cerveza y su elaboración. Al igual que un atleta olímpico, tengo que estar en lo más alto de mi juego y eso es una perspectiva excitante y emocionante. Hasta ahora sólo he sido jurado en una Copa Mundial de la Cerveza (2023, en Nashville), pero me quedé totalmente impresionado por el nivel de los participantes, la calidad de los jueces y la organización de la competición. Fue una experiencia personal enormemente enriquecedora y gratificante que espero repetir pronto.
¿Qué más le gustaría que supiera el mundo?
Juego al hockey (hockey sobre hierba para mis amigos estadounidenses) en un club del suroeste de Londres desde hace muchos años. Es muy divertido, una oportunidad para correr y quitarse las telarañas antes de tomar una cerveza en el bar. La temporada pasada no perdimos y ascendimos a una liga superior. Esta temporada puede ser diferente. Estoy casado, tengo tres hijos adultos y un perro muy vivaracho.