Matthew Peetz
¿Cómo entró en la industria cervecera? ¿Por qué le importa la cerveza?
Empecé a elaborar cerveza casera en la universidad mientras estudiaba la reparación celular utilizando la levadura como organismo modelo. Mi asesor de posgrado estaba a cargo del Rocky Mountain Microbrewing Symposium y pude conocer a expertos del sector mientras trabajaba como voluntario en el evento. Seguí trabajando con levaduras como profesional de la investigación en la Universidad de Colorado Denver antes de trasladarme al Brewing Science Institute. Utilicé mi experiencia en la propagación de levaduras para trabajar en la industria de los biocombustibles antes de fundar Inland Island con un compañero de trabajo. He pasado los últimos cinco años creando mi propia empresa, Propagate Lab, que suministra levadura a las industrias cervecera, destiladora y sidrera. La cerveza es para disfrutarla. Puede transportarte a cualquier parte del mundo mientras saboreas miles de años de experiencia humana e historia. Con cientos de variedades de levadura, lúpulo, grano y otros ingredientes, se puede producir casi cualquier sabor, textura y color de cerveza para su disfrute. Puede elegir el sabor, el color, la sensación en boca y el aroma. O puedes simplemente machacar las lagers. Eso es lo bueno de la cerveza.
¿Por qué participa como juez en la Copa Mundial de la Cerveza? ¿Qué significa para usted ser jurado en la Copa Mundial de la Cerveza?
La cerveza es una maravillosa combinación de cultura, historia, arte y ciencia. Los cerveceros trabajan sin descanso para crear algo que el público pueda disfrutar. Aquellos que son maestros de su oficio deben ser reconocidos al más alto nivel, que es ganar un premio de la Copa Mundial de la Cerveza. Los cerveceros se toman en serio lo que hacen y deben ser juzgados por jueces profesionales y con conocimientos. Tengo 10 años de experiencia en el sector, dirijo programas de formación sensorial en una universidad local y he viajado mucho por Europa. Creo que tengo la formación y la pasión suficientes para asegurarme de que cada muestra de cerveza se juzga como es debido.
